Según el Departamento de Estudios de la Cámara de Comercio de Santiago, en su informe de Tendencias del Retail en Chile 2016, la tendencia N1 es: Las estrategias de inversión hacen foco en elevar la eficiencia y productividad. Para esto, las empresas han definido nuevas prioridades en sus carteras de proyectos, enfocándose en hacer que sus sistemas y puntos de venta sean más eficientes, mejoren los márgenes y la productividad. Como consecuencia, el Retail no está buscando sumar más superficie, sino mejorar las condiciones e instalaciones . Pero, para una remodelación se requiere hacer una inversión, y cerrar el local para construir detiene o disminuye considerablemente las ventas. Entonces, ¿cómo puedo remodelar mi sala de ventas, sin detener el ingreso de capital?
Cuando trabajamos con nuestros clientes en los proyectos de remodelación de tiendas, showrooms o locales comerciales, una de las principales preocupaciones que nos plantean es que no pueden dejar de vender, pero necesitan las mejoras. Para esto desarrollamos una estrategia de implementación que se adapta a cada caso para conservar el funcionamiento de la empresa y que permite que la obra avance.
En este punto enfocamos los esfuerzos en dos variables:
- Avanzar con la construcción de la manera más eficiente posible.
- Afectar lo menos posible el normal funcionamiento de la empresa / tienda.
Para llegar a este equilibrio es necesario conocer profundamente cómo funciona el negocio, y cómo será la nueva forma de operar. Durante el período de construcción trabajamos la obra en etapas, organizándonos estrechamente con los distintos usuarios del espacio para compatibilizar las necesidades de vendedores, personal administrativo y por supuesto el cliente y su relación con las faenas de remodelación. Así, administramos “proyectos intermedios” donde se acomodarán las necesidades de obra y de la empresa con el objetivo de no disminuir las ventas y afectar lo menos posible la experiencia de compra.
El control de carta gantt de obra es uno de los puntos fuertes para esta metodología, ya que permite anticipar la provisión de materiales y preparación de futuras etapas. Se requiere de una coordinación fuerte entre proveedores y especialistas para garantizar la continuidad operativa ya que es clave para el cuidado de la marca frente a los clientes prestar un servicio de excelencia siempre, y para esto se toman todas las medidas de seguridad, control de obra, cierres provisorios estéticos, acústicos, y antipolvo.
En general, la logística y administración de la obra pasa a ser un proyecto en sí mismo, el que se estudia y valida con nuestros clientes para asegurar el éxito del proyecto durante su etapa de implementación.
Ante todo, es importante nivelar expectativas antes de embarcarse en la remodelación: La naturaleza de la obra levanta polvo, hace ruido, ocupa espacio y requiere de colaboración, coordinación y comunicación fluida para tomar decisiones rápidas tanto de proyecto como de presupuestos. Nuestra experiencia y metodología minimizan el impacto, se adapta a las distintas necesidades y ayuda a avanzar de manera rápida y ordenada.
Por Felipe Flores, Project Manager | Siente Cinco